¡Actitud infame!

Atlante con uno menos le arranca el empate a una jaiba sin bravura

Tampico Tamaulipas, marzo 2.- Con una apatía insólita, incomprensible y fuera de lugar, Tampico Madero se deja empatar a un gol por unos “potros” de hierro del Atlante que nunca bajó los brazos y encontró premio, inmerecido, hasta la expulsión de Escobar que sirvió como punto de inflexión en el partido, para bien de uno y pesar de otro.

Al minuto 6’ se presentaría la primera emoción del encuentro cuando Eduardo Pérez en perfecta triangulación con Luis Márquez, deja a este último en posición de disparo, pero el balón caprichosamente se va por un costado del poste. Atlante aun no mostraba las garras. A los 12’, Cesar Bernal era amonestado por propinar una “cegadora” a un rival. Propiciado de esa falta, al 13’ Marcelo Arce dispara dentro del área, pero en un lance Jorge Alvarado rechaza. Los visitantes daban el primer aviso.

A los 18’ el portero Gerardo Ruiz sale del área intentando cortar un avance celeste, éste choca con su adversario pero en una jugada legal, este cae para provocar la detención del juego y el peligro logrando su cometido, Aldo Cano arbitro central compra la falta ante el descontento de la tribuna. Eduardo Pérez comenzaba a dar muestras de querer la batuta del equipo, siendo hasta el minuto 21 el jugador por el que pasaba todos los avances de la “Jaiba Brava”.

Al 27’ Armando Escobar es amonestado por una fuerte entrada en mitad de campo sobre Bernal, de a poco el encuentro iba subiendo de tono registrando falta tras falta. Con un clásico 4-4-2 siendo Pérez y Jiménez como ejes en el ataque, Miguel Fuentes intentaba explorar un parado mayormente ofensivo, siendo su medio campo mucho más de ataque que defensivo. Márquez, Vargas y Guajardo con mucho protagonismo en el partido.

Al 32’ un centro de Pedro Vargas es interceptado por Jiménez pegado al poste, pero por la potencia que llevaba no pudo darle colocación por lo que se le fue por encima del travesaño. Ya era mejor el cuadro albiceleste. El partido era bueno a pesar de no registrar anotaciones hasta el momento. Gabriel Pereyra plantaba al Atlante con un 4-3-3 en teoría muy ofensivo pero que en el papel distaba de serlo. Wilber Rentería, Serge Njoh y Lizandro Echeverría no habían provocado una sola de peligro.

Pese a inclinar el encuentro a su favor, la “jaiba brava” seguía sin demostrarlo en el marcador, el empate persistió durante la primera mitad.

Al inicio del complemento en el cobro de una falta, Guajardo centra la pelota a donde venía cerrando Gabriel Vera quien por centímetros no logra conectar el balón y se va por fuera. Al parecer, Tampico seguía con la misma inercia ofensiva que la primera mitad. Al 55’ Miguel Fuentes manda a Carlo Rodríguez hombre de área y saca a Luis Márquez quien al final no pudo redondear su buena actuación.

Al 56’ se marca una pena máxima a favor del Tampico y el arbitro Cano, le saca la doble amarilla a Armando Escobar. Diego Jiménez cobra pegado al palo derecho del portero Daniel Ruíz quien pese a adivinar la dirección del disparo no puede llegar a la pelota y así la jaiba por fin refleja su superioridad. Con inferioridad numérica y el marcador en contra, de la nada al Atlante se le vino la noche. Pereyra quemaba su último cambio en su afán de revertir la desventaja sacando a Lizandro Echeverría y metiendo a Rubén Betancourt.

Después de verse abajo en el marcador, los “potros” de Cancún tímidamente se acercaban al área en el cobro de un par de tiros de esquina, sin preocupar en demasía la defensa local. En todo momento el partido llevó un ritmo interesante. Al 72’ el recién ingresado Betancourt dispara desde lejos intentando sorprender al portero Alvarado quien en shock se queda petrificado viendo como la pelota pasaba apenas desviado se su puerta. En efecto, Atlante tomaba las riendas, con uno menos, a la jaiba se le ocurrió ceder la iniciativa.

Al 75’ Miguel Fuentes confirma quedar satisfecho con el uno a cero, sacando al hombre del gol Jiménez para darle una nueva oportunidad al uruguayo Ángel Cayetano. Los azulgranas ganaban confianza y su entrenador lo percibía también, por lo que al 79’ mete a Fernando Fernández, hombre de ataque y saca a Marcelo Arce. Increíblemente el cambio le resultaría al instante, minuto 80’ en un trazo largo, Fernando Fernández baja el esférico que ante la pésima salida de Vera, este queda solo dentro del área, dispara abajo y colocado a la derecha de Alvarado para empatar el encuentro.

El gol del empate terminó con el Tampico Madero que en los minutos finales se diluyó por completo y nunca fue capaz de revertir la situación. La actitud mostrada este día no concuerda con lo que se está jugando, el descenso sigue acechando y a los jugadores parece no importarles en absoluto.