Atletico de Madrid vence a Seattle en el Mundial de Clubes

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Atlético de Madrid y Seattle Sounders juegan en el Lumen Field de Seattle, por la fecha 2 del grupo B. Ambos llegan golpeados por sus derrotas en la primera fecha y necesitan sumar de a tres para mantener sus chances de avanzar a los octavos de final.

El equipo dirigido por Brian Schmetzer cayó en su debut 2-1 ante Botafogo, en el mismo escenario donde buscará la recuperación. Por su parte, el Atlético de Madrid llega aún más herido: fue goleado 4-0 por el PSG, el campeón de la Champions League, en un partido que dejó secuelas tanto en lo anímico como en lo futbolístico.

Los primeros minutos del partido muestran a un Atlético mucho más decidido en buscar la apertura del marcador. Enfrente, Seattle busca la manera de contrarrestar esa presión inicial y construir alguna acción en ataque.

La primera gran chance estuvo en los pies de Julián Álvarez, que a los 9 edificó una gran jugada personal ingresando al área con pelota dominada por el medio. La Araña se fue abriendo hacia su izquierda y definió con el botín derecho abierto, pero la pelota dio en el poste y salió.

De inmediato llegó el 1 a 0. Muy buena acción de Giuliano Simeone por la derecha, que engancha y asiste con un pase rasante a la medialuna del área a Pablo Barrios, quien con un fuerte derechazo abrió el marcador (la pelota dio en el travesaño, picó y luego sacudió la red superior).

Ya en modo monólogo, Atlético fue por más y a los 15 casi llega el 2 a 0; un centro desde la izquierda le cayó a Sørloth, que la acomodó de aire y sacó un zurdazo altísimo que llegó a las tribunas detrás del arco.

Seattle buscó la manera de arrimarse al área del conjunto colchonero, pero por momentos careció de precisión y en otras ocasiones lo que le faltó fue suerte porque siempre hubo un jugador de Atleti para bloquear un remate del equipo estadounidense.

A los 25 llegó una nueva ocasión clarísima para los dirigidos por Simeone. Sørloth la recibió, se acomodó, dejó pasar a un rival y cuando tenía todo para definir y concretar un golazo, su remate fue al cuerpo del arquero Stefan Frei, que achicó bien al noruego.

Como suele decirse, los goles que no se concretan en un arco se sufren en el propio. Y eso casi ocurre a los 32, cuando Seattle volvió a pisar el área colchonera y Bell remató con fuerza, pero encontró bien parado a Jan Oblak, que pudo evitar la caída de su valla.

Cuatro minutos más tarde llegó una jugada polémica en la cual primero Yael Falcón Pérez sancionó penal por una falta contra Giuliano, pero a instancias del VAR fue a revisarla al monitor y cambió su decisión y dijo que no hubo infracción.

De entrada nomás, Atlético marcó el 2 a 0 que tanto buscó, y mereció en la primera etapa. Un fuerte remate de Llorente dio en el travesaño (la rozó el arquero), y en el rebote Le Normand volvió a meterla en el medio del área chica y allí estaba Axel Witsel para empujarla al fondo de la red.

Los goles aparecieron de golpe. Porque Seattle sacó del medio y casi inmediatamente llegó al descuento. A los 4, Albert Rusnák encontró una pelota boyando en el medio del área colchonera y anotó para los locales.

Después de una etapa inicial con más oportunidades que situaciones concretadas, en la segunda parte todo cambió: en los primeros 10 minutos hubo tres goles, porque apareció otra vez Pablo Barrios para amargar al entusiasmo que se había generado en el estadio tras el descuento de Seattle.

Luego del 3 a 1, el partido ingresó en una meseta, con juego brusco y demasiado entrecortado. Con el ingreso de Ángel Correa en el Atlético, Simeone busca recuperar la pelota y tratar de ampliar la ventaja.

Más allá del 3 a 1 y de que exhibió una mejor cara que la del debut (0-4 frente a PSG) sorprendió como Seattle le llegó tantas veces y de manera tan fácil a Atlético. Sin dudas será algo que tendrá que seguir trabajando el Cholo de cara al partido decisivo del grupo ante Botafogo.

Finalmente, después de 5 minutos de tiempo adicionado, Yael Falcón Pérez pitó y marcó el final del partido. Fue un encuentro entretenido en donde los goles se demoraron en aparecer, pero cuando lo hicieron fueron todos de golpe.